Medicina Práctica de Guadalupe
En Madrid: en la imprenta de los herederos de la viuda de Juan Garcia Infanzòon. 1750. En folio menor [300 x 210 mm] Foliación: [28], 352 p. ;. Laguna en la tercera página con pérdida (ver fotos). algunos cortes, antiguo cerco de humedad. algunas manchas, rastro de insecto xilógrafo. algo de foxing y algunas hojas más afectadas que la media. Libro bien cuajado, pero algo corto de márgenes. Última guarda desprendida. Encuadernación en plena piel (pasta española), original, con algo de desgaste. Obra rara en comercio. CCPB000141077-6.
Francisco Sanz de Dios y Guadalupe médico del siglo XVIII que ejerció en los Hospitales del Monasterio Jerónimo de Guadalupe. La obra Medicina práctica (1730), se editó en cinco ocasiones, la última en 1756. Se aborda la polémica de la “fiebre”, en base doctrinal entre Sanz de Dios, partidario de la medicina iatroquímica y el hipocratismo de Martín Martínez y Francisco Pacheco.
Con la herencia del siglo XVII se enfrentaron las nuevas corrientes: iatromecánica, iatroquímica y empirismo sydenhamiano bautizado también como medicina escéptica frente a las anteriores. Entre los iniciadores de este cambio pre ilustrado figuran Miguel Marcelino Boix y Moliner, Martín Martínez, José Arnau, Diego Mateo Zapata, Pascual Virrey y Mange, como también debe incluirse la figura de Juan Sanz de Dios y Guadalupe, entre otros. Su situación generacional es paralela, nacen en los años finales del siglo XVII y cumplen su obra personal a lo largo de la primera mitad de la siguiente centuria. En este sentido Francisco Sanz de Dios es un claro exponente de los comienzos de la pre ilustración médica en Extremadura, tema hasta ahora poco estudiado.
La obra de Francisco Sanz de Dios representa un cambio doctrinal en la Escuela de Guadalupe. El estudio comparado entre las obras de finales del siglo XVII, como fue el Compendio chirúrgico (1694) de Diego Antonio de Robledo y la Medicina práctica de Guadalupe (1730), existe un abismo doctrinal. En Robledo la base teórica descansa en el aristotelismo y galenismo, ocupándose de los elementos, humores, en un claro sentido antiguo. En cambio, nada de estas referencias puede rastrearse en la obra médica de Sanz de Dios.
Es preciso añadir que la Cirugía de Robledo conoció seis ediciones que corresponden a 1694, la primera, y las siguientes en 1702, 1703, 1719, 1732 y 1733. Estas últimas coincidieron en el tiempo con las primeras de Sanz de Dios, cuya “Medicina practica” ofrece una nueva concepción de la Medicina. Robledo se limita a los autores tradicionales, Sanz de Dios invoca la autoridad de algunos tratadistas modernos, al tiempo que orilla las citas a los antiguos, salvo Hipócrates. En alguna ocasión Sanz de Dios hizo concesiones a la Medicina heredada como su referencia a Avicena cuando se ocupa del frenesí, tema en el que sigue al autor islámico.
https://www.dip-badajoz.es/cultura/ceex/reex_digital/reex_LXXIII/2017/T. LXXIII n. 3 2017 sept.-dic/93081.pdf
https://dbe.rah.es/biografias/20031/francisco-sanz-de-dios-guadalupe